Si buscas pareja por Internet ten cuidado, podrías estar siendo estafado.
Internet se ha convertido en una de las herramientas fundamentales de nuestro uso cotidiano. Ya sea para buscar una receta del plato que cocinaremos esa noche, encontrar la mejor ruta para llegar al trabajo o lugar de vacaciones. O en el caso que trataremos esta vez, buscar pareja o compañero sentimental por redes sociales o aplicaciones enfocadas a la búsqueda de pareja.
¿Se puede usar Internet para buscar pareja? Sí, pero con precauciones.
En este tipo de temas, el ciberacoso, su variante más cercana: el acoso sexual, el fraude económico y la sextorsión están a la orden del día. ¿No sabes que son? Te haremos un breve resumen.
Se considera ciberacoso al acoso llevado a cabo por una o varias personas sobre otra de manera repetida. Es más común de lo que creemos, pero existen vías para limitar este tipo de actuaciones que tenemos que tener en cuenta. Limitar la información personal que ofrecemos en redes sociales puede ser un buen mecanismo para evitar este tipo de prácticas.
¿Quieres algo más concreto? En la aplicación que usamos a diario podemos encontrar un ejemplo: WhatsApp, podemos bloquear el acceso a la información de nuestro perfil como por ejemplo foto de perfil, información de estado de WhatsApp, última vez conectado, etc. Este ajuste lo encontramos en la sección «Ajustes->Cuenta->Privacidad», en este menú podemos configurar para que todos los parámetros sean visibles únicamente por nuestros contactos, modificando cada parámetro y estableciéndolo en «Mis contactos». De esta manera, nuestra información únicamente lo verá los contactos que tenemos en nuestra agenda. ¿Sigues teniendo alguna duda sobre lo anteriormente citado? ¿Quieres presentar conversaciones de WhatsApp como prueba judicial? Si quieres conocer más acerca de ello pincha aquí. El acoso sexual es una variante del mismo, con la diferencia que los extorsionadores utilizan fotos de la víctima para conseguir sus propósitos.
El fraude económico también se encuentra muy presente en este tipo de relaciones. Una de las partes implicadas comienza a pedir una compensación o beneficio económico, generalmente en pequeñas cantidades, que se incrementan a lo largo del tiempo. ¡Nunca accedas a este tipo de pagos o información de tu cuenta bancaria!.
Por último nos encontramos ante la sextorsión. También uno de los métodos, por desgracia, más comunes en la actualidad. Consiste en el envío de texto, imágenes o vídeos de carácter o connotación sexual que son enviados a la otra persona, con el fin de obtener respuesta en forma de un vídeo similar con el que poder ejercer un acoso a la víctima. Generalmente se envían desde cuentas falsas o perfiles suplantados. ¡No envíes fotos personales si conoces cara a cara a la persona que va dirigido el mensaje, podría ser un estafador!.
