El pasado día 16 de junio entró en vigor la Ley Reguladora de los Contratos del Crédito Inmobiliario conocida como Ley Hipotecaria. Cuyo objetivo es garantizar la protección de los consumidores a la hora de firmar un préstamo hipotecario con el banco. Con esta legislación se pretende asegurar que los clientes entienden los contratos firmados y no se exponen a cláusulas abusivas como los gastos de formalización, intereses de demora o las cláusulas suelo.
Características de la Ley Hipotecaria
Las principales características son:
- Mayor protección para el cliente y aumento del papel de notario. El cliente dispondrá del contrato hipotecario con diez días de antelación para su estudio, viniendo el notario obligado a explicar con detalle las características del préstamo.
- Disminución de gastos para el cliente. Se distribuye los gastos de la constitución del préstamo, siendo por cuenta del banco los gastos a gestoría, notaría, IAJD y el registro, siendo por cuenta del cliente los gastos de tasación y copias de la escritura.
- Desaparece la cláusula suelo. En los nuevos contratos no aparecerá cláusula limitativa mínima de tipos de interés.
- Elección de tasador. El gasto de tasación la sigue asumiendo el cliente, que a cambio se reserva el derecho de elegir el tasador de la vivienda.
- Endurecimiento para los desahucios. Las condiciones para que el banco pueda optar por esta vía se incrementan, pasando que las cuotas impagadas deben superar el 3% del capital concedido o 12 cuotas mensuales si se produce en la primera mitad de vida de un préstamo, y el 7% del capital concedido o 15 cuotas mensuales si ocurre durante la segunda mitad.
Es posible que necesite consultar alguna de las cláusulas de su hipoteca. Póngase en contacto con nuestros peritos contables que pueden ayudarle a resolver las dudas que puedan surgir.